viernes, 28 de enero de 2011

La Ideología de Género: Sistema Imperialista totalitario de ámbito planetario

Sistema Imperialista totalitario de ámbito planetario
UN MUNDO EN GUERRA: IMPERIALISMO HOY
Carlos Pascual
  
"El mundo se divide en tres categorías de gentes: un pequeño número que hace que los acontecimientos se produzcan, un grupo un poco más numeroso que vigila su ejecución y que observa que se cumplan y, finalmente, una amplia mayoría que no sabe jamás lo que ha sucedido en realidad"  
Nicholas Murray Butler
Premio Nobel de la Paz en 1931
Presidente de la Fundación Carnegie y del CFR (Council Foreign Relations)

0.-Introducción
Hablar hoy de Imperialismo puede parecer una extravagancia fruto de una mente afectada por una especie de paranoia. Sin embargo son muchos los hechos que ponen de manifiesto esta realidad. Vivimos en un mundo donde millones de seres humanos son víctimas de una organización política, cultural, económica y social salvaje, inhumana. La conciencia de cualquier hombre normal sería incapaz de soportar  un solo segundo la densidad de dolor del hombre y de los hombres de hoy.
Cada día mueren más de 100.000 personas de hambre habiendo recursos suficientes para mucha más población que la actual. El 60% de la población laboral mundial está en la economía sumergida, carece  de unas condiciones laborales dignas lo que supone explotación, esclavitud, subempleo. Entre 60 y 100 millones de abortos al año en el mundo suponen por un lado un auténtico genocidio, pero también el desgarramiento más radical de aquellas madres y padres que han sido inducidos a este crimen. .Las guerras, entre 30 y 70 conflictos armados en el mundo están engordando no sólo los cementerios sino las arcas de empresas y países exportadores de armamentos, como España. Son innumerables los datos que ponen de manifiesto que la mayoría de la población es víctima del hambre y la miseria, en definitiva de la injusticia. En los últimos años miles de hermanos africanos han muerto ahogados en aguas españolas atraídos por una paraíso material que a ellos se les niega en sus países de origen. Países en muchos casos ricos en recursos, ricos en cultura, ricos en  hombres, mujeres y niños pero que han sido empobrecidos por la codicia, la explotación y la corrupción.
"El  sujeto y el fin de las instituciones sociales debe ser la persona humana".
 Gaudium et spes. 25
Si bien es una evidencia, una realidad, que hay una mayoría de la población del planeta que con su trabajo, su esclavitud y su miseria está financiando el bienestar de una minoría, también es cierto que el materialismo, el individualismo y el hedonismo de las  minoritarias sociedades opulentas (epulonas) suponen una agresión  salvaje a la conciencia del ser humano. En estos días hemos conocido que la primera causa de muerte no natural en España es el suicidio y no los accidentes. En algunos países como Japón, el suicido es una epidemia. Alguien dijo que el suicidio tal vez sea la cuestión filosófica más importante porque si nuestra vida no tiene sentido, es la salida más lógica y coherente. Hoy hay muchas formas de manifestar este desapego por la vida. Desapego inducido por unas determinadas formas de vida y de pensamiento. La tendencia antinatalista, el aborto,  la pasión por la eutanasia y la eugenesia, la alineación y la violencia de la juventud, etc. sin duda manifiestan el sin sentido de una vida cerrada sobre si misma contraria a la naturaleza solidaria del hombre. 
La agresión al hombre y a los hombres hoy en día es radical, integral, global y  sistémicaRadical porque es una agresión que pretende transformar, manipular la propia naturaleza de lo humano. Pretende el control de lo más íntimo del ser humano, es decir su propio ser. Esto se pone de manifiesto especialmente en todo lo se denomina "ideología de genero". Desnaturalizar lo humano, supone anular su intrínseca capacidad de donación, su intrínseca tendencia a la solidaridad, imagen y semejanza trinitaria. Se trata de un  reducir el ser del hombre  solo a sus tendencias negativas que podemos resumir en: la tendencia a querer ser el primero,  la tendencia hedonista, y  la tendencia a poseer. En segundo lugar la agresión es Integral porque  unifica bajo los principios de lucro y poder una realidad compleja formada por lo económico, lo político, lo cultural y lo social, lo biológico y también lo religioso, generando auténticas estructuras de pecado. Se trata  de que todas las dimensiones de lo humano trabajen coordinadamente en una misma dirección.  La política, la economía, la sociabilidad, la religiosidad y la cultura deben tener una unidad de fondo en esta agresión a la dignidad del ser humano. Querer responder a una sola dimensión sin tener en cuenta la complejidad de la realidad es un absurdo. Por otro lado la agresión imperialista es global, no conoce fronteras  todo el planeta es su campo de actuación, todos los estratos sociales,  todos los países, todas las culturas están bajo su campo de actuación. Finalmente, la  agresión es sistémica. Instituciones, estructuras, organizaciones, forman un sistema dinámico de muy difícil identificación pero que están coordinadas internacionalmente sin que haya un centro rector plenamente identificado. Un sistema que actúa las 24 horas del día, siete días a la semana, 365 días al año. Un sistema  morfológicamente variable pero que actúa bajo los impulsos de una ideología basada en una férrea voluntad de poder de los fuertes sobre los débiles.
Este sistema imperialista de ámbito planetario pretende ser un nuevo totalitarismo donde la vida humana esté controlada absolutamente,...
 La ambición de controlar la vida humana desde la concepción a la muerte es la máxima expresión del imperialismo integral, tal como hoy se manifiesta. Como vamos a ver, este imperialismo es metapolítico, ya que procede de una concepción particular del hombre. Las expresiones políticas y no políticas de este imperialismo no son más que las consecuencias perceptibles de esta antropología. Esto nos va a llevar a aclarar la dimensión totalitaria de este imperialismo, cuyos efectos todavía no se han mostrado en su totalidad.
Michael Shooyans
El nuevo orden mundial y la seguridad demográfica
El totalitarismo que se nos quiere imponer se basa en tres negaciones intrínsecamente relacionadas.
  •  Negación de Dios (del Dios verdadero).
  •  Negación de la Moral
  •  Negación del hombre
No tener conciencia de este nuevo imperialismo creo que puede ser el mayor problema con el que inicialmente nos podemos enfrentar. No podemos combatir contra una Bestia si no tenemos conciencia de que esa Bestia existe y actúa en nuestras vidas  de manera sistemática. 

sábado, 1 de enero de 2011

¿QUIEN LIDERA EL FEMINISMO? : ROCKEFELLER

La muy católica Universidad de Navarra, fundada por D. Jose Mª Escribá de Balaguer del Opus Dei, organiza el I Congreso Internacional de Ideología de Género del 9 al 11 de feberero de 2011. Además de contar con la presencia al completo de la plana mayor de la casta política navarra para el acto de presentación, la conferencia inaugural va a ser impartida por la norteamericana Jean B. Elsthain de la Universidad de Chicago.

Desde la bostonianas feminomarxistas de Red Sox a Henry Makow, todos los expertos acusan al grupo Rockefeller de haber fundado ideológica y económicamente el feminismo de género, con la ayuda de la Fundación Rockefeller, de la CIA y de sus agentes. Esta afirmación es verificable tanto por la biografía de la lider feminista y espía a cuenta de la CIA Gloria Stienem como por la financiación de los cientos de departamentos de estudios de género que florecieron repentina e inesperadamente en toda la geografía de los EEUU en el año 1968 sin que hubiera ninguna necesidad o demanda de los mismos.

Por si quedara todavía algún negacionista o algún excéptico con necesidad que se le renueven los argumentos, la Universidad de Chicago que es quien paga los honorarios a la señora Jean B. Elsthain, es propiedad nada más y nada menos que de la familia Rockefeller. Concretamente, Jean B. Elsthain dirige la Cátedra Laura Spelman Rockefeller de Ética Política y Social de la Universidad de Chicago. La mayor parte de su trabajo se centra en el desarrollo igualitario de los roles de género masculino y femenino. Desde el 11 de septiembre de 2001, ha sido uno de los académicos que con más fuerza han defendido las intervenciones norteamericanas en Irak y Afganistán. Blanco y en botella, leche fija [Abden naar Prado].

FEMINISMO, GUERRA DE BAJA INTENSIDAD

La conexión “feminista” Y las guerras de baja intensidad ...



El falso feminismo en todo caso, de falsas profetas y sacerdotisas, no nos hace justicia.

El feminismo , que quiso ser ruta de derechos de las mujeres, si hubiese postulado un feminismo humano e incluyente, hubiera sido otra cosa que nunca ha sido el feminismo. Por el contrario, creció hasta convertirse en un peón más del Imperio, que lo dispone en sus articulados Programas y Operaciones “Perfectas”, de ajedrez político, para desprestigiar, dividir, y vencer.

El feminismo incluyente que nunca existió, promovería valores, no valores divinos dados los tiempos en que el feminismo aparece, pero al menos valores humanos.  El feminismo real toca -por el contrario- tambores de guerra contra todos los valores humanos.  Es instrumento de penetración y ocupación política y cultural.  Despojado de una misión liberadora, el feminismo ha llegado, en Nicaragua, al extremo de marchar, a favor de la opresión social, hombro a hombro con las falanges del capital, y con los más connotados exponentes, de un patriarcado pendenciero y brutal. En realidad es lo que siempre ha hecho.

El feminismosirve al modelo de neo-colonización; vive en sintonia perfecta con los proyectosa imperiales.  Tiene un rol clave en la estrategia de desgaste de la resistencia humana en favor de los valores tradicionales.  En el lenguaje de sus más sesudos analistas, a esto se le llama “luchas por la libertad y la democracia”;  “luchas contra las dictaduras”, o marchas blancas ...  Para nosotros no es nada nuevo.  Lo hemos conocido, padecido y vencido;  se llama coalición de fuerzas antitradicionales.

El Mal diseña sus guerras de baja intensidad, que hoy son fundamentalmente mediáticas, políticas, y de fabricadas imágenes callejeras. Sus ejecutores son las ricas y egocéntricas castas oligárquicas, artísticas y kulturales  que  así  pretenden  defender  sus intereses económicos y su maligno modelo político.  Organizan sus sectas, o brazos “pacíficos” y las llaman “sociedades civiles”; crean movimientos “nítidos”, “políticamente correctos” [marsita-cultural] manipulando causas de justicia;  marchan contra  “autoritarismos”  y  “tiranías” pre-fabricadas en serie, y cortadas con la misma tijera y patrón.  El Mal usurpa banderas, aglutina castas, agrega resentidos y pervertidos, y pretende partirnos, para tirar a matar, allí donde se levante un Proyecto de verdadera Justicia Tradicional.

Alrededor de ese anzuelo de democracia, es que se proclama el falso feminismo, y sus bien pagadas sacerdotisas de cámaras y papel.  Cabe notar que algunas de estas, son de oscura trayectoria personal, y más oscura hoja de vida profesional y política.  Las hay, inclusive, por ejemplo en Nicaragua, hermanadas con las más tenebrosas y temibles figuras de la criminal Guardia Somocista,  y son exponentes perfectas de esa calaña interior, y de su contraparte externa, sanguinaria y brutal.

El feminismo ha convertido en “causa” la enfermedad mental, la frustración, y la venganza mitomaníaca y personal, que atiborra páginas y titulares periodísticos,  para la cual han sido también abundantes, a lo largo de muchos años, las explicaciones psicológicas, sociológicas y políticas.

A través de sus tiranías electrónicas, las agentes descobijadas, han desatado un terrorismo político sin precedentes, contra liderazgos, honras, reputaciones, y contra la más elemental dignidad humana de personas y familias enteras.  Su cálculo político, su afán de protagonismo, su vengativa mentalidad de hijas de casa de la oligarquía local, su servicio fiel a las Banderas Imperiales, europeas y norteamericanas, les ha abierto puertas y portones en todos los escenarios donde la lucha se libra entre el Bien y el Mal.

En su perturbado afán de destrucción política, y de desintegración familiar, a las afanadoras de las oligarquías, no las detiene nada.  No tienen escrúpulos ni corazón, para conmoverse ante niñas tiernas, o niñas adolescentes, a quienes agreden y violentan, precisamente a nombre de su cada vez más falaz, “lucha contra la violencia”.  Recordemos que en cada  familia  agredida,  hay  niñas y niños, muchachas y muchachos, inocentes y frágiles, que reciben, sin merecerlo, incesantes descargas de la más mezquina ambición, la más cruel envidia, o el odio más primitivo.

Este activismo político y cultural, pro-europeo y norteamericano llamado feminismo, viste ropa de mujer, pero no conoce, nunca ha conocido, la sensibilidad del corazón de la mujer y muchísimo menos el del hombre.  Su lenguaje es visceral y vengativo, propio del egoísmo y la egolatría, que caracterizan al capitalismo profundo.  Su actividad cerebral, rapaz y calculadora, suma alegremente, en sus bien aper-trechadas computadoras portátiles, más y más pagos-en-cuotas-fijas, por excelencia en los servicios prestados a la causa del capital.

El frente anti-valores, conducido por este llamado feminismo, es una miserable manipulación del victimismo, las estadísticas y el sentimiento de caballerosidad inculcado durante siglos en la psicología masculina y tiene hoy, como parte de sus tareas políticas, en lo ideológico y cultural, dirigir una guerra de descomposición y “destrucción masiva”, de todos contra todos.   Estas son las típicas maniobras de distracción dentro de la lógica general de una guerra sucia, mediática y perversa, con propósitos evidentes.

Estamos frente a una provocación permanente, que además, aprovecha su rol de operadoras políticas de “derechos”, y utiliza los espacios que su pariente rico les abre, para intentar cambiar la escala de valores culturales, e imponernos normas sociales ajenas y extrañas, para nuestra convivencia familiar y comunitaria.

Pretenden decidir por nosotras, cómo debemos pensar,  hablar,  vivir,  amar,  comer,  dormir, trabajar, pasear;  quieren dictarnos la vida, negándonos precisamente, el derecho a la palabra y la vida.  Usar la inteligencia, tener pensamiento propio, es un delito, a menos que nos acojamos a sus dictados y leyes;  Vivir como mujeres, con creatividad, generosidad y espíritu de mujer, no de hombre, ni de indefinida o inaceptada condición, és otro crimen ...

Fustigan a la izquierda por “machista, Nacional Socialista, y Hitleriana” ... pero se unen a los peores fascistas para desfilar orgullosas, junto a energúmenos de látigo y espuela; hablan de democracia y rezuman intolerancia política y patanería sexista.  Reclaman libertad, pero cercenan libertades, como el derecho a la presunción de inocencia de los varones españoles.  Reniegan de las religiones, de Dios mismo, que califican de “autoritario” y “patriarcal”, y acusan, y acosan, como diosas autoritarias y “patriarcales”, a quienes viven con fé. O se declaran "islámicas" solo para cargar contra el islam conocido y practicado por hombres y mujeres durante más de 1400 años, como si ellas fueran la única interpretes capaces de haber captado el mensaje del Islam.

Cobran caro a sus financistas, por algo que les és natural, rechazar a Dios, odiar al hombre, burlarse de otras mujeres, despreciar a las madres y amenazar a las familias.  A esto le llaman, precisamente, denunciar el abuso del “Estado confesional”, mientras ellas abusan de quienes no comparten su oficio, ni viven de sus beneficios.

Proclaman el aborto, sin respeto a la cultura, y al alma colectiva de los pueblos ...  Atacan criminalmente, al que se atreve a desenmascararlas como agentes políticos de la finanza, mientras  reivindican  a  esas  finanzas como filantrópicas, liberadoras y condenan a las tradiciones como arcaísmo opresor.

En esa guerra político-cultural, que desarrollan a nombre de la mujer, buscan vender sus estereotipos, como post-modernidad política, promoviendo su cultura extranjera, ajena a nuestra idiosincrasia, que forma parte, además, de un modelo cultural fracasado, destructor del mundo, que ha despojado almas, y entronizado egoísmos, soledades y vacíos profundos. Allí es donde nació el feminismo.

Lideresas de la mentira, quieren vendernos como ideal, el Modelo de adoración al Becerro de Oro.  En ese mundo que se rige por el consumo, y la competencia feroz, el ser humano pierde sus vínculos naturales, y, sobre todo, su capacidad de sentir, recibir y dar cariño.  En ese mundo, espejo perfecto de sus deformaciones, la humanidad se reduce, carcomida por el exceso, la complacencia individualista, y el derroche ...  Con ese Modelo ya destruyeron la tierra, y tienen a planeta y especies, en vías de desaparición.

Por eso decimos que sus valores políticos representan la sociedad progresista, excluyente, injusta y empobrecedora, que a los pueblos ha derribando.  Por eso aseguramos que sus ideales morales pertenecen también a ese mundo envejecido, ególatra, donde hombres y mujeres insolidarios, prefieren criar mascotas, en vez de niños, y despoblar, y desarmonizar la Tierra.

Este és el feminismo, basura procedente de las botas del Imperio.  Y está, además, como ya dije, en manos de mujeres que ni viven como mujeres, ni conocen el alma femenina, individual o colectiva.   Ignoran nuestras batallas cotidianas;  no son carne, ni hueso de mujer;  No tienen lazos familiares o afectivos estables;  desdeñan esos dichosos y benditos vínculos del cariño incondicional, indispensables para el sano desarrollo humano.

Favoritas de la “elegante” democracia perfumada, son hábiles para mezclar política y sexismo, como jueces totalitarias y excluyentes, que sólo reconocen sus modelos propios, sus particulares opciones de convivencia, sus criterios pasionales, y sus predilecciones políticas. Su voracidad les impide observar que la mayoría de las mujeres nos reconocemos mujeres, y queremos  vivir y construir, como mujeres, con los hombres, nuestros compañeros, nuestros hijos, nuestros hermanos de lucha, de Comunidad, de nación, y de mundo, una Humanidad  sin odio ni blasfemia.

Y eso, precisamente, es lo que más irrita a las despóticas guardias imperiales.  No admiten que las mujeres optemos por rutas constructivas de mujer, con conciencia incluyente, instinto maternal, y sentido de familia, de pareja, y de hermandad humana.  No admiten que hombres y mujeres creamos posible un porvenir distinto, y trabajemos juntos, creando la indispensable diferencia entre hoy y mañana.

No toleran que tengamos y defendamos nuestra idiosincracia, valores y costumbres, que son  precisamente, los que a través de la historia, han permitido a la Humanidad, amar, compartir, multiplicarnos, soñar y trabajar por una Sociedad mejor.

Nos llaman retrógradas;  nos satanizan;  nos convierten en blanco predilecto de sus venganzas pasionales, porque no compartimos su nifaquismo.

Les financiarán Congresos, escribirán en el País, acudirán a la radio, marcharán ...  Pero lo cierto es que su mensaje no cala.  La gente lo identifica claramente como lo que és :  sexismo politizado, servido en bandejas de oro del Imperio.  Porque és Odio.  De sexo y de clase.  Porque és Odio a la Vida.   Porque és también anti-cultura, de destrucción personal, y familiar.  Porque és cultura de aniquilación ...  ¡Yo las denuncio !